jueves, 17 de junio de 2010

FOTOPRES La Caixa 09

FotoPres es uno de los concursos de fotografía de prensa con más historia y reconocimiento del Estado español. El certámen se organiza con el objetivo de dar a conocer y difundir la fotografía documental, y contribuir a la consolidación, en nuestro país, del documentalismo contemporáneo. Cada dos años la Fundación ”la Caixa” otorga seis becas a proyectos fotográficos inéditos y tres premios a trabajos realizados en los últimos dos años. La exposición muestra las propuestas seleccionadas como premios y becas en la edición del año 2009. Se trata de proyectos con un alto contenido social, que ofrecen un análisis intenso de la actualidad. Los premiados FotoPres'09 son: Emilio Morenatti (Primer premio), Walter Astrada (Segundo premio), Alfonso Moral (Tercer premio), y los becados FotoPres'09: Mikel Aristregi, Lurdes R. Basolí, Jo Expósito, Aleix Plademunt, Marta Ramoneda y Fosi Vegue.

Esta exposición muestra nueve reportajes de otros tantos fotoperiodistas. Cuando este año concedieron el World Press Photo 2010 a Pietro Masturzo por su serie Azoteas de Esperanza, no gustó a mucha gente por aquello de que estaba tomada desde lejos y no había primeros planos. En este premio da la impresión de que han valorado precisamente eso, primeros planos, y fotos cuanto más duras, mejor.
El primer premio se lo ha llevado Emilio Morenatti con una serie de primeros planos de rostros de mujeres a las que han quemado la cara con ácido. Son imágenes bastante explícitas y muy duras a las que les sobra cualquier texto, tienen como título "Reportaje sobre la violencia de género en Pakistán" se le queda corto.

El siguiente fotógrafo premiado Walter Astrada presenta su reportaje "Violencia en la Kenia postelectoral", aunque a primera vista no es tan crudo, tiene fotos todavía más duras.
Y el tercer premiado Alfonso Moral, aunque menos crudo, también muestra un reportaje sobre la miseria en el Líbano. Fotos de pobreza contrastadas con una única fotografía de una familia adinerada.

Estos tres reportajes te los encuentras nada más entrar, y la verdad es que impresionan tanto que se te pone mal cuerpo.
Este tipo de fotografía es necesaria para denunciar y dar a conocer lo que sucede en el mundo.
En los siguientes reportajes, aunque la temática en casi todos sigue siendo la miseria humana, son algo menos explícitos.
Mikel Aristregi nos lleva un poco más al norte, a Mongolia. -40º / 96º es su reportaje con la pobreza, marginación, miseria, animales muertos...como protagonista. El alcoholismo en Ulán Bator. También hay imágenes duras, lo que pasa que para ver estas mismas caras no hace falta irse a Mongolia, en varias plazas del centro de Madrid se encuentra ese tipo de personas
Jo Expósito, su reportaje sobre los inmigrantes subsaharianos sin papeles se desarrolla en Barcelona. Y al igual que sucede en el anterior, está hecho en Barna, pero podía haberse hecho en un suburbio marroquí.

En el de Aleix Plandemunt titulado Dubailand es el contrapunto al resto, ya que está dedicado a los excesos de los jeques en Dubai.


Marta Ramoneda con su reportaje hace otra denuncia sobre Pakistán, en este caso, la persecución que sufren los transexuales en aquel país.

Por extraño que parezca, sólo hay una serie en blanco y negro, la de Lurdes R. Basoli. En esta ocasión dedicada a los barrios chabolistas que hay entre los rascacielos en Caracas.

El que se sale un poco de la temática del resto, porque no todo el fotoperiodismo tiene que hacerse sobre el mismo tema es, el reportaje de Fosi Vegué. Va sobre las salas de fiestas, lo que fueron en los 70. La hipocresía de esas fiesta se muestran en un foto que especialmente me llamó la atención, donde aperece la riqueza, vestidos y lujos de la fiesta, y encima de la mesa un mechero super cutre.

Y para acabar, una proyección donde los fotógrafos cuenta su experiencia al hacer el reportaje.Aparte de los reportajes hay una especie de aula dedicada a Fotohistorias. Proyecto educativo dirigido a estudiantes de la ESO.

Miquel Barceló, CaixaForum Madrid

CaixaForum Madrid repasa los últimos 25 años de trayectoria del artista en una gran muestra que permite al espectador vivir la experiencia pictórica de Miquel Barceló (Felanitx, 1957). La exposición organizada por la Obra Social ”la Caixa” no sólo celebra los logros de este importante artista vivo de talla internacional en los últimos 25 años, sino que sobre todo ofrece al espectador la posibilidad de entender el misterio, la adrenalina y la incertidumbre personal que implica el proceso creativo de Barceló. Así, esta muestra es clave para poder experimentar de forma coherente y emocionante la obra de Barceló a partir de 140 obras, desde grandes telas creadas a partir del año 1982 hasta las más recientes, pasando por sus piezas cerámicas y escultóricas, sin olvidar las acuarelas, dibujos, pósters, libros y cuadernos de viaje. Todo ello permite subrayar el ritmo y la variedad de su trayectoria. El objetivo de la muestra es que el público pueda vivir la obra de Barceló como una experiencia. Para ello, el artista se ha implicado directamente en la selección de obras, prestando algunas telas de su propia colección que convierten la exposición en un auténtico acontecimiento, y no tanto en una retrospectiva de su trabajo. El público descubrirá su respuesta enérgica al mundo material, su relación con la tradición, sus viajes —físicos y mentales, y a través del espacio y el tiempo, el uso de elementos insólitos y su representación del mundo humano y animal.

Miquel Barceló en exposición en CaixaForum Madrid es la gran retrospectiva del artista contemporáneo español.

Miquel Barceló en exposición en CaixaForum Madrid, bajo el título La solitude organisative, es una muestra que reúne 180 obras entre pinturas, papeles y esculturas de Miquel Barceló. La exposición de Barceló es un recorrido cronológico de su trayectoria de 1983 a 2009.
La propuesta: esta exposición tiene como objetivo mostrar las facetas e influencias en la obra de Barceló, uno de los artistas españoles más reconocidos en todo el mundo.
En mi opinión una exposición muy curiosa y entretenida de ver, diferente a muchas otras, y sobre todo original. Un arte muy particular y diferente. Merece la pena verlo.

domingo, 13 de junio de 2010

PAUL GAUGUIN - Escritos de un salvaje

Paul Gauguin - Escritos de un salvaje. Ediciones Istmo, S.A., 2000

Si hay un personaje legendario entre los artistas modernos, ese es Paul Gauguin. La leyenda, el mito, el personje novelesco que él mismo tanto contribuyó a crear nos ha hecho, en muchos casos, muy dificil distinguir lo que de verdad y mentira, de hechos y de literatura existe tanto en su biografía como en su figura artística. Su alejamiento de Europa, que oscurecía convenientemente su perfil tras una cortina de aventura, locura o valentía o, simplemente inadaptación, contribuyó en gran medida a la creación de un mito que, tanto él como sus amigos se ocuparon de preservar cuidadosamente desde la lejanía.

Quizás esperaba mas de este libro, en mi opinión no me ha gustado tanto como creía. Gauguin habla demasiado de su vida en un lugar, otro, su opinión y relación con otros artistas, etc. y apenas cuenta nada de su pintura, su arte, sus cuadros, y su particular modo de entender el color.

En realidad la forma de pintar de este artista no es de mi agrado, aunque sin duda reconozco que es un gran artista moderno. Lo que admiro de él es su originalidad y diferencia respecto a otros artistas. Según Gauguin, para buscar la verdad en el arte había que remontarse a los orígenes, a las cosas en estado puro, salvaje, a la humanidad en estado infatil; por eso pinta de esa manera y viaje a lugares salvajes; él es o quiere ser un salvaje.

Lo que mas me gusta de este artista sin lugar a dudas es que su arte tiene su punto de partida en las emociones, trasmitidas a través del color, un color libre y arbitrario, y no sigue las reglas académicas y los colores de la realidad. Se trata de emociones y sensaciones que se originan en el propio pintor y que hacen referencia a una visión interior que obsesionaba a Gauguin. Una visión liberada del estudio visual de la realidad. Por eso el pintor llegaba mucho mas allá de la realidad tangible.