sábado, 27 de marzo de 2010

IMPRESIONISMO, UN NUEVO RENACIMIENTO. Fundación Mapfre

Fuimos a ver la exposición de los impresionistas en Mapfre para tener mas información y poder hacer un buen trabajo oral en clase. Estubimos mucho mas tiempo esperando en la cola que dentro de las salas, pero aun así mereció la pena porque es increible ver de cerca un cuadro impresionista y observar el rastro de cada pincelada cargada de tanto pigmento que incluso tiene relieve; y todo lleno de color.

Impresionismo. Un nuevo renacimiento recorre la historia del mas importante movimiento artístico moderno, a través de las grandes obras maestras del MUSÉE D' ORSAY. Por primera vez, un conjunto de obras impresionistas de primera importancia se presenta en España, en la Fundación Mapfre, por lo que se trata de una ocasión única para contemplar, a través de los grandes maestros, una visión global de este movimiento artístico que cambió la percepción de la modernidad.
El impresionismo supone un nuevo Renacimiento, que cambiará el panorama artístico. Sin embargo, este movimiento no supone una ruptura radical con el arte tradicional, y no ahoga otras formas de modernidad, sino mas bien al contrario. En los años 70 del siglo XIX, en París, conviven impresionismo, academicismo, decorativismo, simbolismo... Y esa riqueza estilística está contemplada en esta muestra para destacar, aún más, el triunfo del arte nuevo.
Manet se convierte en el hilo conductor de este movimiento, personificando todas sus riquezas y contradicciones; fue un artista apegado a la moderna tradición velazqueña, que se convirtió en el gran animador de los jóvenes artistas que conformarían La Escuela de Batignolles y que animarían las primeras exposiciones impresionistas.

La historia del impresionismo se recorre en esta exposición a través de artistas y obras imprescindibles para la historia del arte: Monet se presenta como el artista más virtuoso, capaz de captar con sus pinceladas pequeñas y vibrantes los continuos cambios atmosféricos. Renoir, por su parte, aparece como el mas sensual y delucado. Pisarro y Cézanne enfatizan la solidez estructural de sus composiciones, mientras Degas trasmite en sus lienzos la instantánea de la vida moderna. Todos ellos demuestran el entusiasmo por la modernidad que inició y vertebró brillantemente Manet.

Aquí debajo pongo algunos de los cuadros que mas me gustaron, con sus nombre en orden de aparición: El columpio, Renoir. La catedral de Rouen, Monet. El Boulevard des Capuccines, Monet. Rue Montorgueil engalanada, Monet. Impresión, sol naciente, Monet. La estación de Saint Lazare, Monet. Evasión de Rochefort, Manet. Los acuchilladores de parquet, Gustave Caillebotte. Autorretrato de Cezanne en fondo rosa, Cezanne. La grenouillere, Monet. La urraca, Monet.









miércoles, 24 de marzo de 2010

Paisaje en formato libre

Elegí este paisaje porque quería hacer algo personal, no cualquier paisaje sino uno que yo conociera y que me trajese sensaciones y recuerdos; y por eso lo elegí, aunque sabía que no iba a ser nada fácil, la ventaja fue que era un formato no academico. Prefiero pintar algo complicado pero con motivación porque me guste, que algo sencillo que no me diga nada.

Lo mas costoso fue sin duda la parte de los matorrales y la hierba nevada; porque ahí donde se ve, hay muchísimas tonalidades de verde; había que hacerlo de una manera difusa, tal como el ojo lo percibe, y eso es algo que a mí me cuesta mucho hacer, pero de todo el paisaje esa parte fue la que mas me gustó como quedó.
Los árboles nevados me llevó muchísimo tiempo y paciencia hacer cada ramita nevada, ramas mas alejadas, mas cercanas, con distintos tonos de marrón, etc. Se que esa parte del paisaje debería haber estado mas difusa y sin tanto detalle, pero no podía cambiarlo después de haber empleado tanto tiempo en ello, y sobre todo porque sabía que no me iban a salir arboles con una pincelada mas suelta.
Corregí el cielo y le di varias aguadas grises, claras y oscuras, y alguna azul para que el cielo pareciese de invierno y no de verano como estaba antes.


Al hacer con ganas un trabajo, como pasa con el paisaje en este caso, lo haces todo con ánimo y con predisposición de que te va a salir, y bueno, en mi opinión podría estar muchísimo mejor y todo mas integrado, pero estoy contenta con el resultado porque es el primer paisaje que pinto; y creo que fueron las ganas y el ánimo que puse, lo que hizo que me saliera mas o menos como yo pretendía.

miércoles, 10 de marzo de 2010

EL COMPLOT DEL ARTE - Ilusiones y desilusiones estéticas


El complot del arte – ilusiones y desilusiones estéticas, Jean Baudrillard. Amorrortu/editores, colección Nómadas.

Jean Baudrillard es considerado como uno de los teóricos más importantes de la posmodernidad. Destaca sobre todo por su interés en el arte y la cultura visual contemporánea, la forma, los valores estéticos, los medios de comunicación y la sociedad de consumo; así como por su particular visión del universo hiperreal que nos rodea.
En El complot del arte. Ilusión y desilusión estéticas, Baudrillard se centra en el estudio de la realidad artística contemporánea y en el contexto visual, publicitario, masivo y de consumo que tanto le influye. En líneas generales, podría resumirse que para él, vivimos en una sociedad en la que predominan las pantallas y las imágenes banales, vacías y superficiales. Unas imágenes tan reales que han perdido el poder de crear ilusión porque ya no hay cabida para el secreto ni para lo oculto, ya no hay magia ni misterio en el arte porque todo se muestra. En un mundo que se ha vuelto mercantil y estético, ya todo se muestra excesivamente al detalle; incluso el arte ha perdido su trascendencia, víctima de la extinción de valores generalizada.
Estructuralmente, se trata de un libro que bien podría considerarse como una recopilación de fragmentos. A los dos artículos que componen el marco teórico de la obra (“Ilusión, desilusión estéticas” y “El complot del arte”), les siguen cuatro entrevistas al autor que ayudan a comprender y a profundizar en sus teorías. Gracias a estas variadas perspectivas, el lector consigue una visión global del mensaje que le permite extraer sus propias conclusiones.
La peculiar visión de Jean Baudrillard está presente en cada página de esta breve obra recopilatoria. Por ello mismo, se convierte en un libro muy recomendable para todos aquellos interesados en el propio autor o en la posmodernidad en general. Con este recorrido por la cultura visual, la estética y el arte contemporáneos, se nos da la posibilidad de comprender el posicionamiento de uno de los teóricos más influyentes en la materia de los últimos años.

Es un libro, aunque corto, dificil de leer y dificil de entender. Tiene una lógica complicada, te pierdes facilmente si no tienes gran capacidad de concentración, también usa un vocabulario a veces dificil y poco común. Todo eso hace que cuando empiezas a leer, se te quiten las ganas aunque tengas interés por su contenido. La verdad es que parece un artículo cientifico, técnico y filosófico sobre la certeza del arte, o puede que lo sea; por eso me ha desilusionado bastante este libro, porque creia que iba a ser de otra manera.
No estoy de acuerdo con muchas ideas de Jean Baudrillard, aunque puedo llegar a entender su postura y su lógica sobre el arte.
No aconsejo este libro a nadie a no ser que esté realmente interesado en el tema. Este libro no me ha aportado gran cosa, salvo saber lo que piensa Baudrillard sobre el arte contemporaneo, que nunca está demás, pero hay muchisimos libros mejores en los que invertir el tiempo.

martes, 9 de marzo de 2010

ARTE DEL SIGLO XX: apuntes al principio de un siglo

Vicente Alemany Sánchez-Moscoso, arte del siglo XX: apuntes a principio de un siglo, Biblioteca de Humanidades coord. Quintín Racionero, ISBN:84-9772-035-0 Publicaciones del departamento de filosofía de la U.N.E.D

El siglo XX ha asistido a un espectacular desarrollo artístico rodeado de polémica. Desde las primeras décadas de siglo, la Vanguardia ha defendido la autonomía del artista y la relación entre el arte moderno y el progreso social. Distintos avances científicos, tecnológicos y culturales han influido en la producción de los artistas; algunas propuestas han pretendido subvertir el orden político y social de su época. A final del siglo se ha producido un crecimiento desordenado del medio artístico y la figura del creador se ha identifivado con la de los profesionales de la comunicación y el espectáculo. A comienzos del siglo XXI los medios tecnológicos permiten producir imágenes con mucha facilidad; éstas posteriormente pueden ser manipuladas, distribuidas y promocionadas por distintos canales y para el espectador resulta necesaria la selección de la oferta. El objeto del presente libro es mostrar criterios para ayudar al lector en esta tarea.

La primera parte del libro es la presentación. Se centra en entender el arte como una parte de las humanidades ya que el arte también es un modo de relación entre los individuos, constituyendo un espacio de comunicación e integracíón cultural. También explica una propuesta de lectura para leer el arte de todo un siglo, ya que este manual se plantea desde la valoración crítica del arte de un siglo que ha sufrido la significativa presencia de la Vanguardia.

En la siguiente parte, el autor habla sobre los orígenes del arte del siglo XX; todos aquellos artistas que construyeron su propio arte basandose en lo original y primitivo. Constantine Brancusi, Louise Bourgeoise, Picasso, Marcel Duchamp etc. y también sobre las principales características de las distintas vanguardias; el cubismo, el futurismo, el dadaísmo, el surrealismo...

Después el autor habla sobre las propuestas. La evolución que sufre el arte moderno en EE.UU dando lugar al expresionismo abstracto norteamericano con Jackson Pollock, el informalismo europeo de Jean Dubuffet, el neodadaísmo, el ready-mades, el pop art con el independent group, Andy Warhol; y el nuevo realismo en diferentes grupos, de niza, parís, etc.

La siguiente parte habla sobre las respuestas que se dieron a las propuestas americanas y europeas:
respuestas americanas: postminimal, land-art, arte conceptual. Y respuestas europeas: fluxus, arte povera, accionismo vienes.
La creación de Joseph Beuys, un artista como chamán influenciado por su experiencia vital, y Andy Warhol, un artista de consumo de la imagen.

La última parte del libro se centra en los años 80 y 90. De la transvanguardia al multiculturalismo, las últimas tendencias del arte postmoderno. Décadas caracterizadas por la dispersión, crisis de identidad y de lenguaje de los artistas.

Es un libro interesante para leer con calma y prestando atención, es conveniente leerlo si te quieres enterar de todos los movimientos artisticos del siglo XX, y saber de que manera unos influyen en otros y están conectados entre sí. Desde mi punto de vista, es mejor leerlo cuando tienes un poco de idea sobre el arte de este siglo, y aunque no lo sepas muy a fondo, te suenen artistas, obras y movimientos, porque si alguien comienza a leer el libro sin apenas tener idea del arte del siglo XX, no va a aprender mas sino lo contrario, va a formarse un lio mental muy grande, que es algo parecido a lo que me pasó a mí. Por eso he tenido que leerlo una segunda vez cuando ya sabía un poco mas y conocía a los artistas que se citan en el libro.

jueves, 4 de marzo de 2010

EL RETRATO DE GIACOMETTI, James Lord

James Lord, Retrato de Giacometti. La balsa de la Medusa. Madrid ISBN:84-7774-620-6

James Lord, escritor de este libro y gran amigo de Giacometti, nos cuenta la experiencia que vivió junto al artista al posar para un retrato que en un principio se realizaría en una sola sesión, pero al que Giacometti necesitó dedicarle diecisiete sesiones diarias más, hasta finalizar el retrato “inacabado” de J. Lord.

El autor nos desvela, a partir de sus emociones y recuerdos, como se desarrollaron cada una de esas sesiones junto a Giacometti, porque iba apuntando pequeñas notas en una libreta sin que lo supiera Giacometti, ya que estaba seguro que si se sentía observado no actuaría con la misma naturalidad.

Cuenta del pintor y escultor sus vivencias y costumbres, además de sus obsesiones, inseguridades y miedos revelados por el artista durante su jornada de trabajo, como su obsesión por lograr algún día retratar la realidad con ese parecido que cree inalcanzable. A medida que avanza el libro, Lord explica como transcurrían esas sesiones, como Giacometti se centra en la cabeza del escritor dejando en un segundo plano el resto de la composición. También cuenta como el artista llega a desesperarse por la obra, amenazando en varias ocasiones con destruirla o empezar de nuevo. Se aprecia como el retrato alcanza su culmen para posteriormente, en minutos, volver a diluirse. Finalmente, tras el decimoctavo estado del cuadro, Lord decide finalizarlo porque tiene que marcharse de viaje y no quiere retrasarse mas, y porque sabe que si no pone una fecha, podrían seguir así años. Dando por acabado un retrato que muchos pensaran que "es ínfimo comparado con la persona real" mas Giacometti es el primero que sabía que un retrato tan sólo puede conseguir cierto parecido con la realidad. Quedan en volver a ver y "terminarlo" algún día.

Giacometti guarda parecido con Cezanne porque raja sus lienzos y los deja sin terminar. Podemos describirlo como un artista existencial porque desea representar todo lo que ve, hacer tangible una sensación intangible, aunque sabe que eso es imposible, y que un ratrato solo puede conseguir cierto parecido con la realidad.

Siempre representa cabezas o bustos, ya sean en pintura a modo de retrato o en escultura, muchos de ellos de su hermano Diego. Con ello descubre que por mas que quieras hacer algo diferente, siempre guardara un parecido o una misma forma con otras creaciones.

Giacometti es un artista que siempre trabajaba con luz natural y nunca acababa sus cuadros; nunca confía en sus logros pasados, es demasiado inseguro y no confía en sí mismo como artista, es excesivamente humilde y sencillo, desesperado, pensativo, melancólico. Y creo que todo eso es lo que hace de el un ARTISTA diferente a todos los demás. Pienso que en el arte, el ego está por las nubes, y Giacometti muestra una visión distinta a esto, y el ser humilde y sencillo hace que nunca vea su trabajo del todo bien y eso le obligue a perfeccionarlo cada vez mas. Esto puede ser una virtud para el arte siempre y cuando no se lleve a tales extremos.

Me ha gustado bastante el libro porque ha sido facil de leer, y porque me ha enseñado bastante, sobre todo me he dado cuenta que no solo hay artistas que se creen dioses, sino que seguramente existan artistas tan particulares como Giacometti.
Me he sentido muy identificada con el, con esa sensación costante de querer romper la obra y todas las que tiene, de dejar de pintar para siempre, y de sentir que no sabe y que es un negado y su cuadro es una mierda.
A pesar de tener esa actitud durante casi todo el libro, no ha sido monotono ni aburrido sino todo lo contrario.

lunes, 1 de marzo de 2010

Alicia en el país de las maravillas







Después de recorrer Londres, Berlín, Tokio, Toronto y Amsterdam, entre otras ciudades, la exposición de Alicia en El País de las Maravillas recala en Madrid. ¿Quién no ha soñado con pasear alguna vez en este fabuloso mundo de fantasía?

El pasado fin de semana 27 y 28 de febrero fui a la exposición que se realizaba en el pabellón 7 del IFEMA sobre el fantástico mundo que creó Lewis Carroll pero desde la original visión del director Tim Barton. Alicia ya no es una niña, tiene 19 años y regresa al país de las maravillas en el que había estado años antes. Se supone que ésta es la versión "definitiva" de la película.

Mientras esperamos a que la película se estrene en cines y 3D el 16 de abril, ésto fue un buen adelanto y una suerte poder ver en directo las piezas, objetos, decorados, vestidos y demás elementos originales usados en la película de Tim Barton.

En la sala antes de entrar pudimos ver 5, 6, o mas repeticiones del trailer de la película mientras esperábamos (algo que resultó demasiado pesado); después de entrar, la muestra está dividida en cuatro secciones: la Madriguera del Conejo, la Sala de las Puertas, la mesa del Te del Sombrerero Loco y la Corte de las reinas Roja y Blanca. Y, en cada una de ellas, podíamos ver desde la corona de la Reina Roja, su peluca, o el trono, hasta la mesa preparada para el Té del Sombrero Loco, las llaves que usa Alicia para moverse en este mundo de fantasía o las flores parlanchinas.

Me llamó muchísimo la atención cada detalle expuesto en las vitrinas sobre el vestuario de los personajes, la mesa del te tenía pastelitos increibles que parecían reales y daban ganas de comerlos, muchísima fruta y demás comida de colores tan intensos que te atraían.

Me gustó pasar por la madriguera del conejo y ver una escultura de Alicia realizada a una escala enorme, y botes de bebidas y otros elementos hecho en diferentes escalas a modo de pruebas o bocetos. Yo apenas sabía muy bien de qué iba ésta película y nunca le había prestado demasiada atención, por eso me pareció muy gracioso que la reina roja tubiara cada detalle con forma de corazón, hasta la cosa mas insignificante.

En esta exposición también puede ver bocetos y seis modelos diseñados para el vestuario de la película por la ganadora de un Oscar, Colleen Atwood. Concretamente, el que luce la misma Alicia (Mia Wasikowska) o la Reina Roja (Elena Bonham Carter).



La exposición duró 15 minutos después de las 2 o 3 horas de cola, pero fue interesante verlo y poder darse cuenta que el arte muchas veces es necesario en este tipo de películas, diseños y creaciones; y es increible el trabajo de los muchísimos artistas que intervinieron en la creación de la película e intervienen en muchas otras parecidas a ésta. Porque aunque mucha gente no lo sepa, el arte no solo sirve para pintar paisajes, retratos, bodegones o dibujar del natural; sino para otras muchas cosas básicas en nuestra vida, como es en este caso el cine.